Soria es una bella ciudad de la comunidad autónoma de Castilla y León (España). Se trata de una localidad poco conocida, pero que esconde auténticas joyas que sorprenderán al turista.
Uno de los mayores iconos de Soria es su Ermita de San Saturio, que fue construida en el siglo XVIII. La ermita del patrono de Soria se encuentra sobre una espectacular peña que se asoma al río Duero, en un romántico y precioso paisaje que tanto Antonio Machado como Gerardo Diego glosaron en sus famosos poemas. Resulta maravilloso pasear camino de San Saturio cuando se el sol se pone pues se puede disfrutar de uno de los atarcederes más bonitos que uno verá jamás.
A la Ermita de San Saturio se puede llegar caminando entre los bellos y legendarios álamos de la ribera del río Duero desde San Polo o bien atravesando el puente peatonal cruzando el río Duero viniendo desde las calles sorianas.
La Ermita de San Saturio se levanta sobre una gruta eremítica visigoda. La entrada a la ermita es a través de un cueva situada a los pies de la misma. En primer lugar, se ve la sala de reuniones del Cabildo de los Heros, un Tribunal de Aguas. Después, se acceder a la ermita, con una parada anterior en el oratorio de San Miguel.
A continuación, por una singular escalera adosada a la roca se penetra en el corazón de la ermita. En este lugar, se visita la sacristía en la cual sobresale un espectacular retablo barroco con un Cristo crucificado de gran tamaño.
En los frescos de las paredes de esta ermita se puede ver la historia de San Saturio. En la cúpula, se pueden contemplar las imágenes de famosos santos ermitaños como San Juan Bautista, San Juan Evangelista, San Benito e incluso Jesúscristo.
San Saturio fue un hijo de una noble y potentada familia castellana del siglo V. San Saturio fue canonizado por ceder todas sus propiedades a los pobres; luego, vivió como un anacoreta. En esta ermita, se albergan los restos y el sepulcro de este santo que se ha convertido en el patrón de Soria. Así, cada 2 de octubre se celebra en toda Soria la festividad de San Saturio con una popular romería.
En definitiva, si uno viaja a Soria debe reservar unas horas para visitar San Saturio y sus alrededorse. Nunca se olvidará.