En Europa, existen numerosas localidades que brillan con luz propia con motivo de la Navidad. En esta ocasión, vamos a conocer cinco cuidades europeas que merecer la pena visitar para pasar una bella Navidad.
1º. París (Francia)
La capital francesa se viste de gala con sus árboles decorados, tanto los tradicionales como los menos convencionales de las casas de moda. Nada mejor que recorrer durante la Navidad lugares tan turísticos como los Campos Elíseos, la avenida Montaigne, la plaza Vendôme, Montmartre o el antiguo mercado vinícola de Bercy. Y todo ello con las luces navideñas y la Torre Eiffel como máximo icono.
2º. Ámsterdam (Países Bajos):
Hay que disfrutar de las galletas de jengibre, pimienta y especias denominadas pepernoten. Se recomienda caminar por los mercadillos de estilo inglés de Leidseplein y Koningsplein, los gastronómicos situados en antiguos edificios industriales y los puestos de souvenirs.
Además, hasta el próximo 17 de enero tiene lugar la cuarta edición del Festival de la Luz, con instalaciones, esculturas y proyecciones de luminosas de artistas de muchos rincones del planeta. Las luces invaden la capital holandesa.
3º. Nápoles (Italia)
En la Via San Gregorio Armeno, los artesanos continúan fabricando como en el siglo XVIII, las bellas, realistas y recientemente irónicas figuras de los típicos belenes napolitanos. En Navidad esta vía se parte en dos con vallas de seguridad para controlar la gran cantidad de turistas que llegan aquí. Los pesebres históricos más famosos son el Cuciniello (museo de San Martino) y el del Banco di Napoli, en el palacio Real.
4º. Londres (Inglaterra, Reino Unido)
El árbol de Trafalgar Square, los mangíficos fuegos artificiales desde el London Eye y el desfile de Año Nuevo son tres opciones típicas de la Navidad londinense. También se puede vistar el Museo Geffrye, el cual hasta el 3 de enero decora sus habitaciones de época para reflejar cómo la Navidad se ha celebrado en los últimos cuatro siglos.
5º. Salzburgo (Austria)
En la ciudad natal de Mozart y en Oberndorf, donde surgió el villancico Noche de paz, la música se apodera de las calles y las casas. Sobresalen los conciertos de Fin de Año en la Gran Casa del Festival, la fortaleza Hohensalzburg, el castillo de Mirabell y el Landestheater. Música y Navidad se unen en Salzburgo y en toda Austria.
