La pequeña estatuta egipcia de un hombre llamado Neb Senu ha causado un gran revuelo en el Museo de Manchester (Inglaterra). Ello se debe a que esta figura gira por sí misma 180 grados, sin quese haya encontrado una explicación razonable a este singular movimiento.
La reliquia, que mide aproximadamente 25 centímetros, es una ofrenda al gran dios egipcio Osiris y fue descubierta en la tumba de una momia en Egipto.
En los últimos meses, los conservadores del museo han comprobado que esta estatua presenta diferentes posiciones a lo largo del día. Por tal motivo, tomaron la decisión de grabarla durante un día entero y se sorprendieron con lo que vieron.
Comprobaron que esta estatua egipcia giraba 180 grados sin que nadie la tocara o se acercarse a ella. La figura, que ha permanecido durante 80 años en el Museo de Manchester permanece inmóvil en la noche, sin embargo a lo largo del día gira lentamente.
Los expertos afirman que este movimiento podría estar relacionado con energías provenientes del Antiguo Egipto, donde se pensaba que si la momia se destruía, la estatuilla podría actuar como recipiente alternativo para el espíritu.
Otros expertos dan una explicación más racional y científica. Consideran que las vibraciones causadas por los cientos de visitantes que pasan por la sala del museo es lo que provoca que la estatua gire.
Asi, el reputado doctor Brian Cox considera que el movimiento de la estatua se debe a la denominada «fricción diferencial». Ello se da cuando dos superficies, la piedra serpentina del estante estatuilla y el vidrio entran en contacto, se provoca una una sutil vibración que es lo que hace que esta estatua del Antiguo Egipto se mueva por sí misma.
Por último, otros expertos afirman que esa vibración no podría realizar el cñirculo perfecto que hace la estatua cada día por lo que quieren seguir investigando este singular movimiento de la estatua.
Foto vía ContextoTucuman.com