La plaza de Omonia está considerada como el centro de Atenas, la capital de Grecia, y en ella convergen varias arterias imporatntes como Athinas, Agiou Konstatinou, 3 Septemvriou, Stadiou y Panepsistimou que llevan hacia todos los rincones de la ciudad. ES una plaza ruidosa, con anchas aceras y repleta de gente a todas las horas del día.
Omonia es una plaza peculiar. En las aceras se reúne gente sin trabajo y en los quioscos se puede comprar prensa extranjera. En unos de los rincones de la plaza está el remodelado café Neón, un notable lugar para tomar café y echarle un ojeada a la plaza. Si se quiere pasear se puede comprar un kuluri (rosquilla de plan y sésamo) en cualquier chiringuito de la misma.
Cerca se halla el Museo Arqueológico Nacional. Las esculturas, frescos, bronces y restos de cerámica cubren casi toda la historia de la Grecia clásica. Recomiendo dedicar unas horas a visitar este museo.
Al lado museo se puede disfrutar del parque Areos, otro de los espacios preferidos de los atenienses durante los días calurosos; es ancho y espacioso, con innumerables bancos donde descansar a la sombra. Por la tarde, se puede regresar paseando hasta la plaza de Omonia.
Desde aquí se puede seguir por la calle Athinas hasta Plateia Monastirakiou, el centro del barrio de Monastiraki, y descubrir los mercados ubicados alrededor de la plaza, antes de volver a Plaka y perderse por sus calles. Así, triángulo compuesto por Omonia, Sintagma y Monastiraki constituye el centro de Atenas.
Por otro lado, sobresale el Mercado Central que abre de lunes a sábado entre las 7.00 y las 15.00 horas. Se trata del mercado más céntrico de la capital helena donde se puede comprar verduras, carne y pescados, en un recinto repleto de colores y olores.
Otro lugares cercanos a la plaza de Omonia que hay que visitar son el Teatro Nacional de Grecia, el Teatro Olympia y el Estadio Olímpico.
Foto vía Atenas Corazón del Mito