En Atenas, capital de Grecia, tenemos numerosos lugares que visitar. Se trata de una ciudad llena de sitios inolvidables. Uno de ellos es el Cementerio de Cerámico. Se trata de ser la mayor necrópolis clásica y la mejor conservada de Atenas.
El cementerio del Cerámico representa un oasis de tranquilidad en medio de un rincón de Atenas industrial y ruidoso. La entrada vale dos euros, si bien se puede entrar gratuitamente con la entrada de la Acrópolis.
En el yacimiento está la puerta de Dipilón, por donde las procesiones entraban en la ciudad en dirección a la Acrópolis, después de recorrer el Agora. Además, se puede ver el emplazamiento de la Puerta Sacra que cruzaban los peregrinos para acudir por la Vía Sacra hasta Eleusis.
Denominado Cerámico por los talleres de alfarería que proliferaban en la zona, el cementerio fue el sitio de enterramiento de los atenienses desde 3.000 antes de Cristo hasta el siglo VI después de Cristo. La gran avenida de las Tumbas, en la que sepultaba a los habitantes más ricos, cuenta con varias magníficas tumbas, sobre todo, la del toro de mármol del siglo IV antes de Cristo. Este sepulcro es una réplica, toda vez que el original, junto con otros bonitos hallazgos, se halla en el Museo Oberlaender, en el interior de este recinto.
Por otra parte, las obras de excavación para realizar una estación de Metro junto al yacimiendo fueron clausuradas a causa de una serie de graves protestas. No obstante, debido a estas obras se descubrieron numerosos tesoros, incluidas más de 7.000 ostrakas (fragmentos de cerámica con los nombres de los estadistas de Atenas condenados al ostracismo).
Finalmente, el Museo arqueológico del Cerámico es un interesante museo arqueológico en el que se hallan expuestos una parte destacada de los descubrimientos de la zona arqueológica del antiguo cementerio ateniense del Cerámico.
Foto vía Sobre Grecia