Winterthur es una ciudad y comuna del cantón de Zúrich, capital del distrito de Winterthur (Suiza). Es la sexta ciudad más poblada de Suiza y la primera entre las que no son capitales cantonales. Winterthur se encuentra en el noreste de Suiza entre Zúrich y la ciudad de Sankt Gallen.
Cuenta con muchas áreas verdes (tiene el conjunto de bosque más extenso del cantón de Zúrich), y está considerada una «ciudad verde«. La edificación suelta en los suburbios, el resultado de una planificación muy previsora de la década de 1920 también logró que se le denominara «ciudad jardín» pese haber tenido un notable carácter industrial marcado por la elaboración de maquinaria hasta la década de 1980. Por ello, la ciudad fue galardonada en 1989 con el Premio Wakker (Wakkerpreis) de la protección civil suiza.
En el sector de los museos sobresale, con más de 500 obras, la colección de Oskar Reinhar que se puede ver en la que fue su casa familiar, donada a la ciudad suiza, junto con unas 800 pinturas y dibujos acumulados desde 1900.
Esta elegante casa, convertida hoy en día en la pinacoteca que lleva su nombre, contiene lienzos de impresionistas como Edouard Manet, Paul Cézanne, Auguste Renoir o Vincent van Gogh, junto con los de grandes maestros de los siglos XVII-XVIII como Lukas Cranach, Hans Holbein, Nicolas Poussin o Francisco Goya.
Fundado en 1858 y nutrido en principio de donaciones de Reinhart de lienzos postimpresionistas, el Museo de Bellas Artes de Winterthur ha hallado en el arte moderno su principal reclamo, con una completa colección de obras que recorren las vanguardias del siglo XX, con obras de Paul Klee, Piet Mondrian o de cubistas como Georges Braque y Fernand Leger.
Si bien el mayor icono de la ciudad es su Museo de Fotografía, que cumple diez años como el único museo de Suiza especializado en esta disciplina artística, con más de 30.000 originales de fotógrafos de prestigio mundial, como Robert Frank, Richard Avedon, William Eggleston o el dúo Fischli/Weiss. Este museo representa la transformación de la ciudad de centro industrial a centro cultural pue se erigió sobre una antigua fábrica textil.
También sobresalen el Palacio Kyburg, el Palacio Mörsburg, el Palacio Wülflingen, el Palacio Hegg y el Castillo Alt-Wülflingen. En definitiva, el turista tiene mucho que ver en Winterthur.