El Gobierno italiano acaba de confirmar que limitará de manera inmediata el acceso de grandes buques de crucero a la laguna de Venecia y que los barcos de más de 96.000 toneladas estarán prohibidos a partir de noviembre del 2014.
Las protestas por los habitantes de la bella Venecia y los ecologistas preocupados por el daño causado por el creciente tráfico de cruceros en la ciudad, uno de los destinos turísticos más populares del planeta, han ido aumentando en los últimos años.
El primer ministro italiano, Enrico Letta, se ha reunido con los ministros de Transporte y Cultura, así como el gobernador de la región del Veneto, donde está la ciudad italiana, y el alcalde de Venecia y ha aprobado planes para limitar e incluso cerrar el tráfico a cruceros en varias zonas de la laguna de Venecia y cerca de la concurrida plaza de San Marco.
El alcalde de Venecia se ha mostrado satisfecho con esta decisión pues acabará con la continua llegada de cruceros en la laguna de Venecia. Además, se ha alegrado que no lleguen en un futuro los megacruceros muy cerca de la famosa plaza de San Marco. Se limitará claramente que barcos pueden llegar hasta este lugar.
Los grandes cruceros no podrán pasar por el canal entre la isla principal de la ciudad y la isla de la Giudecca en la laguna, en tanto que se está erigiendo un nuevo canal de acceso con la principal terminal de barcos.
De este modo, desde enero de 2014, el tráfico de cruceros por delante de la plaza de San Marco en el corazón de Venecia estará limitado y solamente se permitirá a un cierto número de cruceros de más de 40.000 toneladas cruzar el canal de la Giudecca. La cifra será un 20% inferior a la que había en el año 2012.
Foto vía RC Multimedios
